Poco le queda a esta Semana Grande de Bilbao. Apenas unas últimas horas. El caso es que este sábado estos fueron los cuatro conciertos nocturnos, a la misma hora: en Abandoibarra, el de los pijoteros Marlon, que desde el verano pasado han mejorado bastante a base de dar bolos; en La Pérgola, el propuesto por este plumilla, el de Los Pekenikes, que se fundaron en 1959 y se anunció que venían con tres miembros originales; en La Plaza Nueva, el tex-mex, los corridos de los navarros Puro Relajo, una suerte de verbena que puso a corear al respetable; y en el Parque Europa el llamado Fiestazo Megastar FM.
Lo dicho, Marlon, que son asturianos aunque en sus letras hablen a menudo de Madrid, han mejorado mucho desde que les vimos el verano pasado en Santander, en el festival Magdalena En Vivo. De hecho su líder, el cantante con pinta de surfero Adrián Roma, afirmó en un parlamento que llevan un año a tope de conciertos y valoró agradeciéndolo el trabajo de sus técnicos. El de Abandoibarra duró 82 minutos (contando saludos y fotos finales) para 19 canciones, todas ellas coreadas por la chavalería. Todas. La primera mitad del repertorio más que prometedor resultó una realidad con poderío, actitud y comercialidad, y la segunda decayó un tanto por demasiado dispersa en los estilos y por más comercial y menos interesante aunque paladeable o más bien audible.